La represión en Salamanca: la prisión militar

La represión en Salamanca: la prisión militar

Introducción

Hoy hablaremos de lo que actualmente llaman represión durante la Guerra Civil y el Franquismo.

El convento de la Bernardas

En la foto que acompaña este texto, vemos cómo era el Convento de las Bernardas, cuyo nombre era Convento de Santa María de Jesús, y que estaba situado en el Paseo de Canalejas. El edificio original se integró en la construcción del colegio de los Padres Escolapios, Calasanz de Salamanca en 1959. Se conserva, formando parte del propio colegio, la iglesia de una sola nave y el claustro.

Decía que hablaremos de represión, porque este convento se utilizó como prisión militar durante la Guerra Civil Española.

Los centros de represión en Salamanca

En Salamanca,  al iniciarse la guerra, se disponía de una prisión provincial, conocida como la cárcel del camino de la Aldehuela, que había sido inaugurada en 1931. Era una instalación moderna y con capacidad acorde a la población reclusa de aquella época en una ciudad del tamaño de Salamanca.

Como al iniciarse la guerra la idea era dar un golpe de estado rápido y fulminante, que arrancara de todos puntos de España y acabara con la toma de Madrid pocos días después, las cárceles no tenían suficiente espacio para albergar a tantos prisioneros como se iban haciendo al fracasar esos planes y convertirse en una guerra.

Por esta razón, se utilizó también la antigua cárcel de la cuesta de Sancti Spíritus, situada en lo que fue el monasterio del mismo nombre del siglo XII y que había servido de cárcel durante años, hasta que se construyó la del camino de la Aldehuela de los Guzmanes. El edificio fue derribado en 1961.

Y ya para finalizar el artículo sobre la "represión" 

Además de las celdas o calabozos que pudieron existir en las sedes  de las distintas fuerzas paramilitares que campaban impunemente por la ciudad, de las que se disponen pocos datos, más allá de testimonios de mayor o menor fiabilidad, en Salamanca también se habilitó un campo de concentración de prisioneros.

Antes de explicarlo, pido un ejercicio de situación y comprensión, ya que el cine nos ha desviado mucho la imagen de lo que era un campo de concentración.

Hay que acusar la diferencia sustancial entre lo que fueron los campos de concentración desde antes de la Primera Guerra Mundial, que eran instalaciones temporales o viejos edificios o cuarteles, que se empleaban para alojar a la gran cantidad de prisioneros que se hacían tras una batalla y a los que se les intentaba dar un trato lo más digno posible dentro de su condición como prisioneros de guerra, que son los que había en España (en las dos Españas de esa época),  y lo que fueron campos de tortura y exterminio en las zonas ocupadas por la Alemania del Tercer Reich o los Gulags Soviéticos de Stalin, cuyo fin era utilizar a esos prisioneros para el esfuerzo de guerra propio o eliminarlos por completo de una manera impune.

Aclarando este punto, el campo de concentración que se utilizó en la ciudad de Salamanca fue en el Colegio Francisco de  Vitoria. Fue utilizado como campo de concentración de prisioneros republicanos, al ser un edificio recién construido y no inaugurado por aquellas fechas.

Su uso se limitó a soldados presos o entregados, a los que se recluía en este centro hasta completar su investigación. Lo normal era que se les hiciera una recarga de dos a cuatro años de servicio militar obligatorio, en redención de haber formado parte del ejército de la República.

Foto 1: Prisioneros en la prisión militar de Salamanca en 1937, BNE.
Foto 2: Convento del las Bernardas. Autor desconocido. Wikipedia.
Foto 3: Cárcel de la cuesta de Sancti Spíritus. Guzmán Gombau.