El inicio de la Guerra para las unidades militares de Salamanca

El inicio de la Guerra para las unidades militares de Salamanca

Los combates en el Alto del León.


Tras la declaración del estado de guerra el día 19 en la Plaza Mayor, comenzaban casi tres años de guerra para los militares destinados en Salamanca.



Inicio de las misiones militares locales

Como hemos visto anteriormente, tras la declaración del estado de guerra por la incorporación de la VII División al alzamiento de Melilla, las unidades militares presentes en Salamanca comenzaron a participar en misiones de seguridad y vigilancia en edificios y puntos estratégicos de la ciudad.

El mismo día 19 fueron ocupados el Gobierno Civil, el Ayuntamiento, Correos, Telefónica, la emisora de Radio Salamanca y la estación de tren. De igual forma, se distribuyeron plantones en algunos puntos de la ciudad en misión de vigilancia.



La marcha hacia Madrid

Aunque se sigue discutiendo el término a emplear en el inicio de la Guerra Civil, está perfectamente documentado que el plan inicial del General Emilio Mola (el director) era tomar Madrid en pocos días.

Consideraba en aquel momento que casi todas las Divisiones iban a apoyar el golpe de estado, pero suponía que en Madrid, Barcelona y Valencia iba a ser una labor más complicada. 

Por este motivo, la idea de maniobra era un avance rápido desde las guarniciones de Zaragoza, Valladolid y Pamplona sobre Madrid y que en aquellos lugares en los que no triunfara el alzamiento militar, las fuerzas leales se mantuvieran en los cuarteles y resistieran el asedio hasta recibir refuerzos.

Con este comienzo salieron hacia Madrid, desde Valladolid y Pamplona, las conocidas "columnas", formación militar heredada de la Guerra de África, en las que el jefe de la misma, tenía bajo su mando varias Divisiones extremadamente reducidas, pero con las que combinaba el uso de las diferentes armas.



La llegada a la Sierra de Guadarrama

Las primeras unidades en entablar combate fueron las que llegaron a la Sierra de Guadarrama.

Las unidades que habían partido de Segovia, habían encontrado resistencia en el Puerto de Navacerrada y las que salieron de Valladolid, lo hicieron en el Puerto de Guadarrama (Alto del León).

Según las órdenes de operaciones iniciales, la columna de Valladolid debía tomar el Puerto de Guadarrama y la de Pamplona el de Navacerrada. En ese punto esperar la llegada de la columna de Zaragoza y proceder a mover la línea del frente más hacia el sur progresivamente hacia Madrid.

Al encontrar resistencia en ambos puertos y haber fracasado completamente el alzamiento en Madrid, comenzaron las primeras batallas de lo que ya apuntaba a una guerra civil.



Los combates en el Alto del León

La columna de Valladolid, al mando del Coronel Ricardo Serrador, alcanzó las faldas de la Sierra de Guadarrama el día 22 de julio, al llegar al pueblo de San Rafael, donde recibieron noticias de que el puerto se encontraba ya ocupado por las tropas del gobierno.

La columna estaba formada por el primer Batallón del Regimiento de Infantería San Quintín 25, cuarto Escuadrón del Regimiento de Caballería Farnesio 10, primer Grupo del Regimiento de Artillería Ligera 14, sección de automóviles y sección de sanidad, contando con menos de 800 hombres en total.

En la columna iba integrada igualmente una Centuria de Falange de Valladolid, compuesta de unos 80 hombres más.

Al llegar a Villacastín se les había unido a la Columna una Compañía del Batallón de Ametralladoras 7 de Plasencia, que había llegado el día anterior a Ávila y al llegar al Espinar, una pequeña columna compuesta por una Compañía del Regimiento de Transmisiones de El Pardo, una Sección de la Guardia Civil, una sección de ametralladoras formada por artilleros de la Plana Mayor del Regimiento de Artillería Ligera 13 y  una Sección de la primera Batería de cañones 75 motorizados.

Estas unidades avanzan ya desplegadas desde San Rafael hacia el Alto del León, en la tarde del día 22 de julio, encontrándose envueltos en duros combates con las fuerzas gubernamentales que ya habían tomado posiciones y se encontraban parapetadas en posiciones dominantes.

A las 20 horas de ese día 22 se conquista el Alto del León, tras casi seis horas de combate y con más de 80 bajas entre heridos y muertos.

Dejaremos para otra ocasión la narración de estos combates, que fueron extremadamente violentos e interesantes para la Historia.

Dada la importancia del Puerto, se vio continuamente atacado por las unidades republicanas para tratar de recuperarlo. 

Ante el fracaso en el avance rápido marcado por el General Mola y, ante la posibilidad de tener que abandonar el Puerto, comienzan a enviarse unidades de refuerzo a la Columna Serrador.



Movimientos de tropas desde Salamanca hacia el frente

El día 24 de julio a las 12:30 sale de Salamanca el II Batallón del Regimiento de Infantería la Victoria, al mando del Cte. Juan Toribio de Dios.

La misión encomendada a este Batallón era apoyar a la Columna del Coronel Serrador en los combates del Alto del León, ya que los días 22 y 23 habían sufrido un alto coste de personal y material, para conquistar y mantener el dominio sobre el puerto.

En el trayecto hacia su destino, entablan los primeros combates en Villacastin, sin demasiada importancia.

Esa misma noche llegan a El Espinar, donde acampan. A la mañana siguiente retoman marcha y se incorporan al puerto de Guadarrama cerca del mediodía del día 25 de julio, siendo desplegados en el sector derecho del frente, relevando a una compañía de fusiles del R. I. San Quintín 25, que pasa al sector izquierdo, con el resto de su Batallón, y entrando en combate nada más llegar.

El día 26 de julio se había considerado como el definitivo por ambos bandos para reconquistar o mantener el Puerto. 

Dese primera hora de la mañana, se había observado un intenso movimiento de unidades que se dirigían hacia el pueblo de Guadarrama. La preparación artillera (con el tiro ya corregido tras varios días de combates) y la superioridad de la aviación republicana, comenzaron a castigar la explanada del Alto del León desde muy pronto en la mañana.

Durante todo el día de sucedieron los bombardeos y golpes de mano de la infantería apoyada por carros de combate. Esta situación no cesó hasta entrar la noche, tras 15 horas de combates. La jornada se saldó con un total de 215 bajas.

Por la noche se incorporó el General Ponte, procedente de Valladolid, para inspeccionar el frente y tomar la decisión de resistir o replegarse.



Sale un segundo Batallón de Salamanca

Ante la dureza de los combates que estaban desarrollándose en el Alto del León, el día 26 salieron varios camiones de Salamanca, con el I Batallón del R. I. La Victoria al mando del Cte. Juan Ortiz Roces y voluntarios que se incorporaban al frente. 

El día 27 no cambió del proceder de días anteriores para las unidades en el Alto del León. Próximos al amanecer comenzaron los bombardeos de la artillería y la aviación republicana. 

A lo largo de esa mañana se recibieron los apoyos del Tercio de  Requetés Abárzuza, compañías de ametralladoras del Batallón de Montaña Arapiles 7 y un convoy de municiones para la artillería.

A las 11 de la mañana es alcanzado por la aviación gubernamental, el puesto de mando del Coronel Serrador, resultando heridos tanto el Coronel como el General Ponte, siendo el estado del Coronel de gravedad. Por ese motivo se prepara su evacuación para el día 28 hacia Ávila y toma el mando de la Columna el General Ponte.

Al anochecer y tras otras 15 horas de combates, finalizan los bombardeos. La jornada se salda con 65 bajas.



A las cuatro de la madrugada del día 28 se incorpora el primer Batallón del R. I. la Victoria, incorporándose directamente a su posición asignada, junto con el otro Batallón del mismo Regimiento, en el sector derecho del frente.

Al alba comienzan de nuevo los bombardeos de la aviación y de la artillería republicana. Hasta la puesta de sol se sucedieron los distintos ataques enemigos tratando de envolver la posición, pero ya se comenzaba a notar el desgaste producido por el paso de los días sin conseguir el éxito y fueron repelidos todos ellos. Se estimaron unas 44 bajas en ese día.

En esta jornada, vista la situación más favorable y los refuerzos recibidos, se comienza a dar forma a la orden de operaciones para pasar a la ofensiva y comenzar a avanzar en la ladera madrileña de la Sierra de Guadarrama.


Pero ese capítulo lo dejaremos para otro día...



Fotos 1, 2 y 3 de El Adelanto de Salamanca 1936
Fotos 4, 5, 6 y 7 de la Biblioteca Digital Hispánica

Comentarios

  1. Hola, me gustaría contactar usted,c on el autor de este blog. Escribame a redaccion@noticiassalamanca.com o llameme al 625 100 002.
    Un saludo, antonio

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